Estaréis pensando por el titular de este post que los más de 200 kilómetros que nos hemos metido entre Roncesvalles (Navarra) y Nájera (La Rioja), nos han sorbido la poca materia gris que nos queda en el cerebro.
Lamentamos llevaros la contraria. Si bien es cierto que algo zumbados estamos (esto viene de serie) la realidad es que hemos disfrutado de un día increíble. Sol y nubes, algo de viento y unos paisajes espectaculares, con verdes praderas angulosas y un magnífico cielo azul. Vamos, una estampa muy similar al del famoso fondo de escritorio del Windows XP. Sin duda, lo más destacado de la jornada, junto con la sensación de libertad y camaradería propias de estas aventuras.
El día comenzó en Roncesvalles. Tras un copioso desayuno, digno de cualquier ávido peregrino, y de unos pequeños ajustes en la Vespa 125 N de Javier, enfilamos en dirección Logroño, pasando por los pueblos navarros de Larrasoaña, Arre, Villaba (el pueblo de Miguel Indurain), Zizur, Puente La Reina, Estella, Los Arcos y Viana, terminando en el pueblo riojano de Nájera, a unos 80 kilómetros de Burgos.
Todo este recorrido lo hemos hecho por carreteras secundarias, rodando prácticamente solos y disfrutando mucho del paisaje. Hemos hecho fotos en todos los puentes románicos e iglesias y monasterios del camino. Sin prisa pero sin pausa, hasta llegar a nuestro destino.
La llegada ha sido complicada, ya que a la puerta de nuestro hotel y en una plaza aledaña, se daban cita unos 500 jóvenes de entre 15 y 18 años de la localidad, todos ellos adictos al botellón y a la sana costumbre española de dar la nota cuando se va en manada. Nos han pedido hacer de todo: jacos, caballitos (¿no es lo mismo?), tumbadas, etc, etc. Menos mal que el hotel tiene parking, porque de no ser así habríamos subido las Vespas a la habitación... jeje.
Tras una pasada por la ducha (Javier se ha dado un baño de media hora), hemos ido a reconocer la zona y hemos terminado en un restaurante apretándonos sendos entrecots con unas setas y pimientos del piquillo. Todo aderezado con un crianza riojano que ha provocado el deleite de nuestros paladares. Tras el postre vuelta al hotel, donde nos encontramos preparando la etapa de mañana y escribiedo este post.
Un día maravilloso sin dudarlo. Una gozada. Lo hemos disfrutado. Y como buenos peregrinos toca descansar.
MIL GRACIAS a todos por seguirnos y por vuestros mesajes de ánimo.
Besos y abrazos, según corresponda!!!
We did it
Buenos días y ánimo ¿Quien soy ? os mando una pistita ¡ESTAIS TONTISMOS DEL TO¡Desde esta maravillosa montaña en la que vivimos Pedro y Heidi ( esto me lo ha soplado mi maridito), os deseamos un estupendo viaje y que no paséis muchas penurias, aunque en vista de los banquetes que os pegais,dudo mucho que al final del camino la vespa pueda con vosotros
ResponderEliminarBesos a los dos, de Pedro y Heidi
Estamos de acuerdo con Heidi y Pedro (no sabíamos que habíais terminado juntos) en que a este paso las Vespas no van a poder con vosotros tras los homenajes que os pegáis.
ResponderEliminarSeguid disfrutando...Por cierto, mañana toca pescado...
Sergio y Paz
Hola espero que vuestro camino os vaya genial. Una pregunta si vosotros vais conduciendo "las nenas" quien conduce la frego ( ojala sea una frego hippi del 69 como la que me gustaria tener a mi).Deseo que tengais una buena jornada, (lo de la frego hippi es una indirecta para Javier Andreu) si sabe quen soy que llame por favor. BUENA SUERTE
ResponderEliminarSergio & Paz, MUCHAS GRACIAS por estar ahí. A todos los demás también. No os podéis imaginar la ilusión que nos hacen las llamadas y comentarios en el blog. Desde que nos subimos a la moto estamos deseando llegar para ver qué nos habéis dejado. UN BESAZO ENOOOOORME!!!
ResponderEliminarA mis amigos, el flipao de la frego, el compare y mejor amigo, heidi y pablo, a cuchi y mis gordis y todos aquellos que os mola e interesa el blog y que os sorprende y agrada.
ResponderEliminarHay distintos grados de dificultad para hacer las cosas. El camino, viendolo desde dentro sitúa al personaje en distintos escalones:
El peregrino supeheroe indiscutible, el que empieza y termina andando; el valiente, el que empieza y termina en bici; el pijo romántico, el que pudiendo ir a todo tren, quiere tener su semana de sufriento medido y controlable.
Es mas una sensación de quiero, hago y termino que otra cosa.
En este mundo sin retos y de vida facil, por qué no?.
Marquémonos retos y cumplámoslos, es posible que sirvan de algo.
Besos y abrazos ...